Son similares en todos los bifosfonatos; los más frecuentes durante la terapia son: artralgias y alteraciones gastrointestinales (diarrea). Se han registrado ocasionalmente dolor abdominal, glositis, dispepsia, mialgias, cefalea, iritis de carácter leve y que no obligó a la suspensión del tratamiento. Existen reportes de alteraciones oculares (iritis), similares a los otros bifosfonatos.
Los eventos adversos que ocurrieron en más del 5% de los pacientes que reciben Risedronato en forma semanal incluyeron: dolor en la espalda, tórax, abdominal o no específicado, hipertensión, síndrome gripal, infección no especificada, sobredosis, náusea, constipación, dispepsia, artralgia, mialgia, fractura traumática, cefalea, astenia e infección del tracto urinario. Pueden presentarse también en forma menos frecuente, ambliopía, bronquitis, calambres en las piernas, miastenia, edema periférico, sinusitis y tinnitus.